LA ALIMENTACIÓN DEL TORO DE LIDIA

La alimentación del toro bravo se entiende muchas veces y en exclusiva, al alimento o grano que se le da al toro que está próximo a lidiarse, y esa idea no deja de ser parcial y casi errónea. El becerro desde que nace debe tener la alimentación necesaria para su crecimiento y sus necesidades de vida. Junto a todo esto no se debe olvidar tenerlo al día en cuanto a vacunas, saneamientos y desparasitaciones ya que influirá de igual manera que la alimentación en el momento de su lidia.

Ahora bien en este concepto debe de entrar la vaca madre, la vaca necesita de praderas abundantes y ricas para obtener todos los nutrientes que el becerro necesitara durante el tiempo de gestación ya que como cualquier otro mamífero recibe todo por medio de su madre que será factor fundamental para su buen desarrollo como feto y después como producto para las plazas de toros. En la alimentación suplementaria de la vaca brava se emplean fundamentalmente alfalfas deshidratadas o henificadas, henos de diferente composición y calidad así como paja de cereales natural o tratada, ensilados y algún tipo de alimento concentrado. También es frecuente el empleo de subproductos típicos de la zona donde se encuentra la ganadería, que por cierto abaratan considerablemente los costos de estar comprando alimentos y suplementos ganaderos.

Así los becerros reciben henos concentrados como alimentación suplementaria en las épocas de sequia, buscando así un tipo de nutrientes que contribuyan al desarrollo del esqueleto de los animales y que aporten poca grasa a su dieta. En definitiva se usan piensos de crecimiento hasta llegar al año y al momento de su lidia, momento en el que estos alimentos suelen sustituirse por otros
denominados de acabado, que deberán tener bajo contenido de grasa y que son formulados en su gran mayoría con materias primas de origen natural. Es importante que los animales tengan un buen sistema óseo durante los primeros 2 años de vida para que sea capaz de soportar el peso que en muchas ocasiones será excesivo al llegar a su etapa adulta. Para esto se les proporcionaran alimentos y suplementos ricos en calcio y fosforo ya que son los más importantes para el desarrollo óseo, el esqueleto del toro bravo al nacer representa el 20% del peso del animal y que de todo el organismo es el área de mayor velocidad de crecimiento, mientras que cuando es adulto es el 10% de su peso y es el área que más despacio crece.

Durante la etapa final de la fase productiva, los concentrados van a constituir la base de la alimentación en el toro de lidia y el aporte de hierba va a limitarse mucho, para conseguir que los ejemplares alcancen los pesos mínimos que se exigen en las plazas.
Los principales fracasos en la alimentación del toro bravo se reflejan en las plazas ante la escasez de fuerza que muestran muchos
animales, especialmente aquellos a los que se mantiene pasando hambre la mayor parte de su vida, con el objeto de que desarrolle
mas la encornadura, y luego se ceban a toda prisa durante los últimos 8-10 previos a su lidia. Esta alimentación, claramente descompensada, supone que las reses salgan al ruedo soportando un peso inadecuado para su sistema óseo, que en la gran mayoría de los casos no han acabado de completar con el periodo de osificación. La alimentación administrada a los animales que serán destinados en breve para la lidia es muy elevada para conseguir el peso deseado en un tiempo reducido ya que debemos contar con el hándicap de la edad, estas ganancias rápidas tan importantes pueden tener una repercusión negativa en la forma física y resistencia final del toro como ya lo cite anteriormente sin embargo la suplementación intensiva en la época previa a la lidia puede contribuir de forma eficiente a dar el trapío deseado en el animal, pero no permite compensar los defectos de crecimiento que el toro arrastra desde temprana edad.

A partir de los tres años y medio el toro puede lidiarse en cualquier momento y el peso concreto dependerá de distintos factores como son: peso tipo de cada ganadería dependiendo del encaste de procedencia de la misma y la categoría de la plaza en donde se va a lidiar, de tal modo que el peso mínimo para lidiar en plazas de 1ra será de 460kg, en las de 2da será de 430kg y en las de 3ra será de 410kg.

Un toro en su etapa final gana de peso en promedio 500g/al día por supuesto que va condicionado a la buena alimentación y al balance exacto de todos los nutrientes que este necesita. Los pesos en las diferentes etapas de vida en el toro bravo son:
Al nacer tiene un peso de 25kg,durante la lactancia que dura de 6-7 meses en promedio su incremento diario será de 0.4kg/al día para tener un peso de 110kg.El incremento de peso hasta ser añojos será de 0.3kg/al día de tal manera que al final del primer año de vida su peso será de 155kg.Al llegar a erales el incremento en el peso será de 0.3kg/al día de tal modo que al final del 2do año de vida su peso será de 265kg.Ya de utreros el incremento diario será de 0.2kg/al día para tener un peso al final del 3er año de 335kg.Finalmente ya siendo un cuatreño el incremento de peso diario será de 0.3kg/al día de tal modo que al final del 4to año de vida tenga un peso de 420kg y en los últimos 4 a 5 meses de su vida tenga una ganancia de 0.5kg/al día y llegue con 470kg.

Un toro que este rondando los 510kg tendrá casi ya los 5 años cumplidos mas como ya lo cite todas estas estadísticas están sujetas a la buena alimentación y suplementación que le demos al toro desde su etapa embrionaria hasta llegar a su lidia. Aprovecho para decirles a los ganaderos que tengo formulas para el mejor rendimiento de sus toros con las cuales evitaran problemas como los mencionados en esta nota y que abarcan desde añojos hasta toros de corrida. Estas formulas fueron elaboradas por veterinarios taurinos prestigiados para el curso de mayorales de reses de lidia en España y de hecho en varios ranchos de la península ibérica se están usando con resultados satisfactorios.

EL TORO DE LIDIA


¿QUÉ REPRESENTA?

La mayor aportación zootécnica de España al resto del mundo.
La máxima expresión de la fuerza y la gallardía.
El toro bravo, se siente dominador de todos los terrenos que pisa y no duda en acometer contra el que intente invadirlo. Ningún otro animal muestra similar pauta de comportamiento.
Es un animal salvaje aunque conviva estrechamente con el hombre. Necesita grandes extensiones de terreno. Su aptitud es la bravura y se selecciona únicamente para acometer.